Acurrucado junto a la
ventana, miraba asustado el resto de la habitación. Aquel día le dijeron sus
padres que no había monstruos en su habitación, entonces porqué ellos dormían
juntos, pensaba el niño; él sabía que aquella sombra que veía podía ser de sus
juguetes, pero ¿y si era un monstruo?. Sólo quiero que llegue el amanecer
pensaba asustada la sombra, ante la mirada fija del niño.
Microrrelato seleccionado en la antología "Escritores al alba" de Diversidad literaria.
las sombras y los niños ..... joder!! felicidades..
ResponderEliminarMuchas gracias.
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